El presidente de la Unión 
 Europeala Unión  Europea
En el discurso sobre el Estado de la Unión  ante la Eurocámara  de
Estrasburgo, Juncker presentó las directrices a seguir por la política europea
para el nuevo año, entre las cuales han marcado la agenda el reciente Brexit,
las políticas de creación de empleo, la lucha antiterrorista y la ayuda al
desarrollo.
El Brexit ha alterado
los cimientos de la Unión  Europea.la
 Historia  de la Unión 
 Europeala Unión , lo que ha llevado al
actual presidente de la
 Comisión  a definir la situación actual de Europa como una
crisis de carácter también “existencial”. 
En el tema de empleo se
proponen doblar el programa de inversiones lanzado en 2014, en lugar de los 315.000
millones de euros en 3 años, el nuevo “plan Juncker” prevé un aumento a 500.000
millones de euros antes de 2020, y llegar a los 630.000 millones hasta 2022.
Por el momento no está claro como se va a financiar este
incremento y como reunir los 21.000 millones que se pretende que aporte el
Fondo Europeo para inversiones estratégicas. Serán necesarios más recursos del
presupuesto del bloque, así como de los Estados miembros. 
Los primeros frutos de este proyecto no se han hecho esperar, con
la creación de 100.000 nuevos puestos de empleo y 200.000 empresas, gracias a
la movilización de 116.000 millones de euros.
Hay que seguir avanzando, no obstante, y crear un entorno propicio
para atraer la inversión privada. Para ello hay que “acelerar” el proyecto de
una Unión de Mercado de Capitales. 
El motor principal de esta política económica ha de ser la
creación de empleo, el presidente Juncker consideró en su discurso sobre el
Estado de la Unión 
que el controvertido tratado de libre comercio con Canadá (CETA) es el mejor y
más avanzado que la Unión  Europea
En el marco de la lucha
antiterrorista se plantea un sistema de información para identificar a las
personas que viajen a la Unión  Europeala Unión  Europea
En el caso de crisis, tales como crisis humanitarias o naturales
(como la actual “crisis de los refugiados” o el terremoto de Italia) se crearán
un “Cuerpo de Solidaridad”, formado
por voluntarios que han de intervenir en estos casos, de forma coordinada y
rápida.
Tratando otro de los asuntos probablemente más de uso cotidiano
por parte del ciudadano, destacar la ampliación de Internet de rápida velocidad 5G y banda ancha antes del 2025, y
ofrecer la conexión gratuita en las plazas públicas de los centros urbanos más
importantes de Europa (la cobertura 5G ya se encuentra implantada en algunas
zonas clave, tales como principales vías de comunicación europeas, carreteras y
líneas férreas). También se reformarán las normas de las telecomunicaciones
para favorecer la inversión necesaria y que en 2025 todos los hogares europeos
puedan contar con banda ancha de al menos 100 Mbps. Del mismo modo se procederá
a facilitar la conexión a Internet con mayor capacidad de descarga en centros
educativos, hospitales y universidades. 






